En POSTALES ARGENTINAS el trabajo fisico fue muy intenso. La diferencia de tamaño con Pompeyo Audivert hacía posible una relación de conflicto corporal muy productiva. Así los recorridos de un cuerpo sobre otro, las paridas como abortos (en términos de acciones físicas) llegando al lanzamiento por sobre un mueblecito, hicieron de la pieza uno de los paradigmas de los ochenta. Texto e imagen, cuerpo y espacio, fueron desarrollados hasta sus últimas consecuencias con la mano directriz de Ricardo Bartis. Un lujo histórico.
1 comentario:
Un lujo histórico, verdaderamente.
Si bien no la vi -porque en ése tiempo tenía 12 años- en todos los talleres, escuelas y espacios teatrales a los que asistí, escuché hablar sobre esta obra alguna vez. Hasta que finalmente la leí en el libro de Bartís "Cancha con niebla" (leerla no es como verla, lo sé).
Actualmente estoy estudiando en el Sportivo y sabrás, que de una de las paredes de un baño, cuelga la foto de un afiche de la obra (esas cosas que tiene RB). En la foto está Pompeyo con una prótesis de nariz y vos sobre sus brazos, desparramada.
Varias veces me detuve a mirarla mientras me cambiaba para entrar a clase, y pensé "Cómo se animaron?!". Porque esa creo que fue una de las razones por las cuales esta obra es un lujo histórico, porque se animaron a desarrollar otro lenguaje, con otros tonos, con otras actuaciones, otros temas, otras formas de contar...
Perdón María José, es un cuelgue mi comentario, lo sé...jaja!
Saludos
Cuni
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